Los libreros de Moyano se trasladarán en septiembre, provisionalmente, ante la verja del Jardín Botánico

Las 29 tiendas de libros que desde 1925 se ubican en la Cuesta de Moyano, a un paso del Retiro, variarán en septiembre su colocación y pasarán a colocarse en el paseo del Prado, delante de la verja del Jardín Botánico. Así lo acordaron ayer tras una reunión celebrada entre representantes de los libreros y del Ayuntamiento. La razón de este cambio hay que buscarla en las molestias que ocasionan, a libreros y clientes, las obras de construcción de una subestación eléctrica subterránea en la calzada de la Cuesta de Moyano.

La subestación, que empezó a construirse a primeros de mes, sustituirá a la que ardió por entero a causa del incendio del pasado julio en la calle de Almadén.

La compañía eléctrica propietaria de la subestación, Unión Fenosa, se ha comprometido a pagar el traslado y el alquiler de las nuevas casetas, que serán iguales a las empleadas en la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, que se instala todas las primaveras en el Paseo de Recoletos.

En el acuerdo al que llegaron ayer los representantes del Ayuntamiento y de los libreros se especifica que el traslado durará mientras se prolonguen las obras de la nueva subestación, que los técnicos de Unión Fenosa creen que durarán hasta el verano del año que viene.

Las molestias de las obras son enormes: no sólo por el estruendo que causan dos enormes taladradoras que horadan continuamente el suelo, sino por el vallado de la calzada, que además de conferir a los libreros una cierta sensación de claustrofobia, les impide llevar a cabo adecuadamente las labores de carga y descarga de materiales. En un principio, el Ayuntamiento había ofrecido a los libreros dos posibles emplazamientos, ambos en el paseo del Prado: frente a la verja del Jardín Botánico y en el bulevar central. Los libreros han preferido el primero porque, entre otras razones, "está más cerca", según aseguraba el miércoles Armando Castillo, uno de los portavoces de los vendedores.

Por otro lado, el solar que quedó desocupado en la calle de Almadén tras el incendio de la antigua subestación eléctrica, y que ha pasado a ser de propiedad municipal, será destinado a zonas públicas, ya que quedará al lado de la nueva sede del Caixa Fórum. La construcción de esta dotación cultural privada va aparejada a la eliminación de la gasolinera que actualmente está situada al lado.