13 años de cárcel para tres miembros de la 'banda de los peruanos'

La Sección Octava de la Audiencia de Barcelona ha condenado a un total de 39 años y 6 meses de cárcel a los principales cabecillas de la banda de los peruanos, que en los últimos años habían causado gran alarma social por cometer centenares de robos y hurtos en la antigua autopista A-7. Además, en mayo de 2000, los tres acusados intentaron matar a tiros a un agente de policía durante una persecución, después de que éste les sorprendiera asaltando a un caravanista.

El tribunal castiga con 13 años y 6 meses de prisión a Miguel Mendoza, alias Ojitos, el miembro de la red que ha acumulado más detenciones. A Marco Antonio Herrera y Luis Alberto Román les han sido impuestas sendas penas de 13 años. Por otra parte, Luis Quispe, alias el Zurdo, no llegó a ser juzgado porque se encontraba en paradero desconocido. La Sección Octava cree probado que los condenados cometieron los delitos de homicidio en grado de tentativa, tenencia ilícita de armas, hurto en grado de tentativa, resistencia, hurto de vehículo de motor, atentado, y las faltas de lesiones y hurto en grado de tentativa. La sentencia indica que el 5 de mayo de 2000 los tres procesados y otra persona sin identificar circulaban en un BMW robado por la autopista A-7 a la altura de la salida de Blanes (Selva), cuando hicieron señales a un caravanista con matrícula extranjera para que se parara, como así hizo. Mientras Mendoza distraía la atención del conductor, Herrera trató de sustraer los objetos de valor que había en el interior de la caravana, pero un agente de policía que iba en un vehículo camuflado se dio cuenta de sus intenciones.

Al percatarse de su presencia, se inició una persecución en la que los asaltantes huyeron a gran velocidad. Cuando los dos vehículos estaban en paralelo, Mendoza y Román gritaron a Herrera "mátale, dispárale, acaba con él". El agente consiguió esquivar las balas dando un volantazo, aunque un disparo llegó a alcanzar una puerta trasera de su vehículo policial.