El tranvía tendrá que pagar el coste de reforzar los autobuses mientras no funcione

Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) ha reforzado algunas de las líneas que dan servicio al Baix Llobregat y mantendrá este refuerzo mientras no funcione el tranvía, pero tiene decidido que el coste corra a cargo de Trammet, la sociedad que gestiona el tranvía. TMB no pudo precisar ayer el importe de la factura, porque "estará en función del número total de horas", explicó un portavoz, que añadió que es el mismo caso que cuando falla un tren o un metro y las empresas correspondientes fletan autobuses para suplir el servicio.

La empresa del tranvía dejó de dar servicio el pasado sábado y, presumiblemente, lo reanudará el lunes, aunque ayer en Trammet nadie se atrevía a garantizar que sea así porque la empresa seguía sin tener certeza alguna sobre las causas de los problemas. Se seguía eliminando el aislante bituminoso, consecuentemente con la hipótesis de que era una partida defectuosa, pero se barajaban otras posibilidades.

Técnicos de TMB, que explota el metro barcelonés, colaboraron en los primeros momentos con los del tranvía "tras una petición informal", según un portavoz de TMB. Estos técnicos opinaron que el aislante no es el adecuado y no rechazaron su sustitución, pero no se pronunciaron sobre si es o no defectuoso. Fuentes de la empresa del tranvía aseguraron desconocer la colaboración e incluso sugirieron que no se había producido.

La Autoridad del Transporte Metropolitano analizará hoy la situación provocada por la falta de servicio del tranvía, incluidas las posibles indemnizaciones que quepa reclamar a la empresa. No obstante, el consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, aseguró ayer que el Gobierno no se ha planteado, al menos de momento, la rescisión de la concesión por incumplimiento de contrato. Trammet confía en conocer en breve los análisis hechos por la empresa Thyssen, que ha suministrado el aislante, y por la Universidad Politécnica de Cataluña, y poder determinar las causas del problema.