La Asamblea del PNV critica a su tribunal interno por su actuación en los comicios en Vizcaya

Los miembros de la Asamblea Nacional del PNV, convocada de forma extraordinaria para analizar la crisis que vive la formación de Josu Jon Imaz por su proceso electoral interno, vivió ayer una jornada en la que los dos sectores enfrentados volvieron a cruzarse críticas por la "instrumentalización" del Tribunal Nacional del partido.

La Asamblea Nacional, máximo órgano peneuvista entre congresos, había sido convocada antes de la tumultuosa sesión que se vivió en la noche del jueves en Sabin Etxea, sede central del partido en Bilbao, en la que una abrumadora mayoría aprobó que Iñigo Urkullu, ahora presidente de la Ejecutiva vizcaína y hombre de confianza de Imaz, pudiera optar a la reelección en esa provincia.

Horas antes, el Tribunal Nacional había dictaminado que Urkullu era inelegible, aceptando el recurso presentado por tres afiliados ligados a Iñaki Zarraoa, alcalde de Getxo y rival de Urkullu en el proceso electoral. Zarraoa es el candidato del sector de Joseba Egibar y Xabier Arzalluz. Iñaki Arregi, uno de los cinco miembros del tribunal, se presentó la noche del jueves ante la Asamblea vizcaína con la docena larga de folios de su sentencia. Balbuceante, pidió permiso a los 168 apoderados presentes para leer la resolución. Los congregados, ya calientes por las luchas intestinas desde que se abrió la sucesión de Arzalluz, gritaron que las leyera ya. "Para qué crees que estamos aquí, hombre", dijo uno de los presentes. La asamblea a esa hora aún desconocía el sentido del fallo, aunque ya había sido filtrado a los medios. Un histórico del PNV asistente a la reunión dijo que "el tribunal, el órgano que vela por la legalidad interna, se había saltado todas las normas, algo que no ocurrió ni en la escisión [de 1986, que dio lugar al nacimiento de EA]".

Duro debate

El duro debate que siguió a la lectura del fallo, que considera inelegible a Urkullu y a la vez ve la situación "fácilmente subsanable" por la propia asamblea, finalizó con una votación en la que por 158 votos a favor, cinco en contra y cinco abstenciones, se permite a Urkullu optar a la reelección y se reabre el proceso donde se suspendió: en la segunda vuelta, en que Urkullu está barriendo a Zarraoa.

El PNV vizcaíno, que agrupa a más del 70% de la afiliación, explicó ayer al resto de organizaciones los pormenores del enfrentamiento. El tribunal interno fue criticado por una actuación que el sector oficial cree "de parte", dentro de un proceso de "desestabilización interno cuyo último responsable es Arzalluz", que se resiste a convertirse en un simple "militante de base", según indicaron fuentes del partido.

Fuentes cercanas a Imaz dijeron que el objeto de la asamblea era "tomar las riendas de la situación" ante el enfado generalizado de la militancia. Imaz ha defendido en su entorno su voluntad de reformar los procesos de elección y un plan que incluya "nuevas formas de comunicación de la dirección con la base".