La paz, una asignatura invisible destapada por la tragedia

Hace falta que ocurra algo tan dramático para que empiece a comprenderse la importancia de las asignaturas que forman en valores, entre ellas, la educación para la paz. Triste pero cierto. Aunque tiene su explicación.

"La dificultad de educar en valores, como defender la paz o respetar al otro, está en que éstos son muy abstractos. La prevención es necesaria pero las cosas se entienden mejor cuando hay experiencias que permiten ejemplificarlos", explica la catedrática de Ética Victoria Camps.

La educación para la paz lleva desde 1990 en los currículos escolares como asignatura "transversal". Se enseña dentro de las materias tradicionales cuando viene al caso, aunque las transversales han sido excluídas de los desarrollos de la Ley de Calidad que todavía no se han aplicado.

"Aquellos centros que ya han incorporado en su acción docente el cuidado del bienestar emocional de los alumnos y la educación en valores estarán en mejores condiciones para enfrentarse a estas nuevas situaciones", dice Álvaro Marchesi, que impulsó la introducción de estas materias con el PSOE.

Roberto Rey, de la Fundación Hogar del Empleado, dice que "es el momento de recordar la importancia de las asignaturas transversales". Y recuerda a profesores y padres que "las actitudes no se enseñan, se transmiten". "Es el currículo oculto que todos llevamos dentro, lo enseñamos con nuestras actitudes, y los chavales lo aprenden al vuelo".