Diplomacia preventiva y centralidad de la ONU

"El PP cree todavía que estamos en el siglo XIX y que con su política de cañoneras o de compañía de Indias se puede volver a sus sueños de una España imperial". La frase, pronunciada en una reciente conferencia por el diplomático Miguel Ángel Moratinos, diputado socialista por Córdoba y futuro ministro de Exteriores, según dijo el propio líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, quiere resumir irónicamente toda la distancia que separa al proyecto de acción exterior del próximo Gobierno y al del Ejecutivo saliente.

A "la tendencia perversa a la privatización de las relaciones internacionales expresadas por políticas como la efectuada por la Administración Bush y seguidas dócilmente por el presidente Aznar", el Gobierno del PSOE opondrá el "afán por consolidar un multilateralismo eficaz", basado en la "diplomacia preventiva" y la centralidad de la ONU, para mantener la paz y el desarrollo en el mundo. "La mejor manera de manifestar oposición a la guerra es reforzando a la ONU", ha dicho Moratinos.

Este enfoque implica también un mayor compromiso con los derechos humanos, y en ese sentido los socialistas se han comprometido a firmar y ratificar el protocolo facultativo de la Convención de Naciones Unidas contra la Tortura, cosa que el Gobierno de Aznar no había hecho. Se trata precisamente de una de las recomendaciones formuladas por el relator de la comisión competente de la ONU que hace una semana publicó un informe en el que afirmaba que en España se practica la tortura de modo "no sistemático", pero tampoco "esporádico".

Alianza contra el hambre

También la cooperación será reformada, según anunció Zapatero, cuando dijo que sacaría a España de la foto del "trío de las Azores" para meterla en la Alianza contra el Hambre lanzada el pasado 30 de enero en Ginebra por el secretario general de la ONU, Kofi Annan; el presidente francés, Jacques Chirac; el brasileño, Luiz Inàcio Lula da Silva, y el chileno, Ricardo Lagos.

El Gobierno aumentará al 0,5% del PIB la ayuda al desarrollo -Aznar se comprometió en la cumbre de Monterrey a llegar al 0,33%- y hasta el 0,7% en la próxima legislatura. También reforzará el papel en la gestión de la ayuda del Consejo de Cooperación al Desarrollo, en el que pueden participar las ONG, aunque muchas de ellas hoy están fuera del mismo.