Los ciudadanos salen de forma masiva a las calles valencianas

Las manifestaciones celebradas en las tres capitales valencianas fueron tan masivas como mal organizadas, especialmente la de Valencia, que, según una primera estimación de la Delegación del Gobierno, reunió a 700.000 personas, aunque minutos después la cifra oficial fue elevada hasta el millón de asistentes. En Alicante la cifra oficial fue de 250.000 personas, mientras que en Castellón la cifra ofrecida por la Subdelegación del Gobierno era de 100.000 asistentes. En los tres casos las pancartas predominantes fueron las de No a la violencia y No al terrorismo, aunque también se vieron algunas de No a la guerra. Escasearon las pancartas de rechazo a ETA.

El recorrido elegido por Juan Cotino, delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, para la manifestación de Valencia convirtió el acto en un caos que generó protestas entre los ciudadanos. Miles de ellos se vieron imposibilitados de sumarse a la manifestación. La cabecera de la marcha, que coparon los cargos del PP -aunque con medio recorrido hecho accedieron a la pancarta más representantes de otros partidos- ya tuvo serios problemas para iniciar la marcha en la plaza del Temple porque se encontró de frente con miles de ciudadanos que pretendían sumarse a la protesta. Pero lo mismo se repetía en todo el recorrido.

La gente trataba de llegar a través de las calles que desembocan en el recorrido oficial, pero también estaban colapsadas y la ciudad se convirtió en un ir y venir de gente que recordaba a uno de los días punta de las fiestas de Fallas. Sólo que, aunque ya hay algunas fallas en las calles, ayer no había petardos.