Cómic enigmático

Las nuevas consolas y ordenadores ya son casi capaces de reproducir la realidad. Por ello la mayoría de los juegos se parecen en exceso. Es el momento de la innovación, de encontrar nuevas formas de hacer lo mismo con un sello personalizado.

Nadie confundirá XIII al verlo. Es el primer juego de acción subjetiva con estética de cómic utilizando la técnica del Cel Shadding. Está basado en la colección de 15 volúmenes del cómic de igual nombre creado por el dibujante belga Jean van Hamme y el argumento del juego sugiere involucrarse en un magnicidio en primera persona.

Sólo se sabe que el presidente de Estados Unidos ha sido asesinado durante un baño de masas, tal como ocurrió con John Fitzgerald Kennedy. El jugador despierta amnésico en una playa y con una llave de una caja de seguridad de un banco de Nueva York en el bolsillo. No recuerda nada y lleva una marca en su pecho con los guarismos romanos XIII, cuyo significado desconoce. Tambaleándose, deberá llegar hasta el banco sorteando a los enemigos que no dejan de perseguirle por algún motivo que desconoce. Sólo unas escenas en blanco y negro que se intercalan en la acción le permiten recordar vagamente los hechos que le han conducido a tan desesperada situación.

Ubi Sotf no se ha conformado con dar aspecto de cómic a las imágenes y además ha adoptado varios recursos propios del formato, como las onomatopeyas, para representar explosiones o los pasos de un enemigo que se acerca. La música es típica de un filme de intriga policiaca y combina perfectamente con la acción y con las excelentes voces que han intervenido en el doblaje español.

XIII es distinto, pero no es perfecto. El motor del juego es el de Unreal tournament modificado, pero la inteligencia artificial de los enemigos y los movimientos de éstos distan mucho de los presentes en el juego de Epic. Son reacciones mecánicas y movimientos robóticos en un título en el que debería destacar la agilidad de los personajes pertenecientes a un cómic.