Kahn: "En Madrid tendré que ganar yo solo para pagar mi error"

El portero del Bayern y de la selección alemana, Kahn, de 34 años, responsable del gol del empate del Madrid, reconoce que la presión psicológica a la que está sometido puede haberle afectado y recurre a la introspección para examinar qué cosas merecen la pena. Eso sí, para la vuelta, en el estadio Bernabéu, se propone superarse a sí mismo: "Ganaré yo solo para pagar mi error. Tenía que haber parado el tiro de Roberto Carlos incluso sin brazos ni piernas". Si se pierde la eliminatoria, dice, asumirá la responsabilidad total.

La presión psicológica que el mismo ha impuesto a su vida parece, en efecto, haber derrotado a Kahn. Una escandalosa separación de su esposa, que paría a su segundo hijo mientras él se paseaba por las discotecas con su nueva compañera, Verena, de 22 años, y se convertía en pasto de la prensa amarilla. Broncas con sus compañeros, a los que acusó en televisión de "no tener huevos". Toda la semana previa al partido con el Madrid la vivió en una agria disputa con su suplente en el conjunto nacional, Lehmann, también de 34 años, que juega en el Arsenal y reclama la titularidad. Lehman declaró que no le habla porque no tiene nada que decirse con un tipo que dejó a su mujer y anda con una chica. En Croacia, Kahn prefirió aguantarse una lesión a dejar que le sustituyera Lehmann y se tragó un balón bombeado, el del 1-1. A última hora, Alemania ganó por 1-2.

El ex jugador del Bayern y actual seleccionador de Hungría, Lothar Matthäus, resumió con crudeza la situación de Kahn: "En los últimos años ha criticado a sus compañeros y ninguno lo ha olvidado". Tras su error del martes, destaca, nadie se acercó a darle ánimos.

"¿Qué me pasa?"

Al final, Kahn desapareció sin hacer declaraciones, pero ayer afrontó a la prensa: "Así es la vida de un portero. Siempre te pueden cazar. No importa cuándo, ni cómo, ni dónde. Tienes que contar siempre con ello. Siempre he dicho que, en este negocio, en décimas de segundo cambian mundos".

Admite Kahn que se excedió en discusiones absurdas, que no merecían la pena, sobre su actuación en Croacia. Todo eso le afectó: "Yo también tengo límites". Hace examen de conciencia y concluye: "Con seguridad, tengo que preguntarme qué me pasa. Yo creo que nunca estuve en tan buena forma física. Nunca trabajé ni me entrené tanto. Pero algo no anda bien. Tengo que buscar los motivos, introducirme dentro de mí y preguntarme qué significa todo esto".

Asegura Kahn que no piensa retirarse y que arde en deseos de enfrentarse de nuevo al Madrid. No obstante, advierte: "Hay momentos en que uno debe plantearse si las cosas marchan como es debido".