El desplome de un edificio en Alicante obliga a evacuar la finca colindante

El desplome de un edificio en avanzado estado de deterioro en el centro de Alicante obligó ayer al desalojo de las familias de un inmueble colindante, a la espera de conocer si el derrumbamiento afectó a la estructura del bloque. Entretanto, el Ayuntamiento de Alicante ha ofrecido alojamiento a los afectados en hoteles de la ciudad, según informaron fuentes del parque local de bomberos.

El derrumbamiento del inmueble se registró al filo de la una y veinte de la madrugada del lunes, sin causar heridos. El edificio se vino abajo, un inmueble de cuatro plantas en deplorable estado, según los bomberos, por causas desconocidas en el número diez de la calle Vicente Inglada, en las inmediaciones del Mercado Central de la capital alicantina.

El edificio estaba habitado por dos personas en las plantas alta y baja y que, en esos momentos, no se hallaban en su interior. La posible presencia de una inquilina provocó momentos de tensión entre los efectivos, según describió un bombero. Finalmente, se comprobó que no había víctimas.

Los escombros cayeron sobre un local anexo, que en esos momentos se encontraba en obras. El derrumbamiento dejó, inicialmente, intacta la fachada y afectó a toda el ala derecha del inmueble. Al lugar del suceso se desplazaron inmediatamente efectivos del parque local de bomberos y de la Policía Local, quienes procedieron a evacuar a los inquilinos del edificio colindante para evitar posibles riesgos.

Técnicos municipales trabajan para determinar las causas del desplome. La hipótesis más probable es el posible daño en la estructura del edificio como consecuencia de las obras que se efectúan en un solar anexo, donde se proyecta la construcción de un edificio con garaje. La Policía Local cortó al tráfico rodado la vía del inmueble siniestrado.