El consejero riñe a los médicos y rechaza darles 10 minutos por visita

"No he venido aquí a hacer un acto electoralista", advirtió ayer el consejero de Sanidad. Al millar y medio de profesionales de la atención primaria que se congregaron ayer en Barcelona, Pomés no les prometió más recursos ni un aumento de las plantillas, como reclama el colectivo. Al contrario, el consejero les riñó porque "no han sabido ofrecer la sensación de proximidad que el público pide" en el que ha de ser el primer eslabón de la sanidad, y les pidió que "gestionen mejor el tiempo" de las visitas médicas en lugar de reclamar 10 minutos por paciente. Ambos toques de atención del consejero fueron recibidos con sonoros murmullos de desaprobación por los asistentes al congreso.

Pomés admitió que la demanda de más tiempo por paciente es "legítima" y "honra" a los profesionales, pero agregó que "más tiempo significa más presupuesto para Sanidad y menos, por ejemplo, para Enseñanza". La afirmación sentó mal al sindicato Metges de Catalunya. El secretario general del sindicato, Patricio Martínez, lamentó que el consejero "frivolice" la demanda de los médicos y aseguró que lo "prioritario" para garantizar una buena calidad asistencial "no es buscar nuevas fórmulas de gestión ni asegurar más competencia profesional, sino ofrecer más tiempo al paciente para darle confianza y humanizar así la medicina". La Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria se pronunció en el mismo sentido y denunció el "exceso de trabajo de los médicos" derivado de la "insuficiente" plantilla de facultativos.