El barrio de Gràcia y los músicos de la OBC, con el 'No a la guerra'

Son pequeños gestos, pero salen por doquier. La campaña ciudadana para rechazar la guerra en Irak tuvo ayer dos expresiones visibles en Barcelona. La plaza de la Virreina de Gràcia se convirtió en un improvisado campamento donde varias decenas de activistas manifestaron su rechazo a la escalada bélica. Pero los carteles de No a la guerra no sólo se vieron en la calle. Los músicos de la Orquestra Ciutat de Barcelona i Nacional de Catalunya también los lucen en las actuaciones que ofrecen este fin de semana en el Auditori. La iniciativa surgió de los empleados de esta instalación, muchos de los cuales también exhiben el cartel estos días.