Los Goya hacen justicia a Manuel Alexandre, secundario imprescindible

Las huellas del tiempo en su rostro dan fe de una intensa vida inundada de personajes que han pasado por él y a los que ha dado mucho de su existencia. Manuel Alexandre (Madrid, 1917 ) recibirá mañana el Goya de honor 2002 como recompensa al trabajo que ha realizado en el cine. Son cerca de 300 los papeles que ha interpretado a lo largo de su vida. La mayor parte, pequeñas intervenciones, interpretaciones secundarias, pero que forman parte imprescindible de la historia del cine español: títulos como La vida por delante, de Fernando Fernán-Gómez; Calle Mayor, de Juan Antonio Bardem; Plácido, de Luis García Berlanga; El año de las luces, de Fernando Trueba; Amanece que no es poco, de José Luis Cuerda, y Atraco a las tres, de José María Forqué, entre otros.

Todavía hoy se muestra entusiasmado con la película que va a empezar a rodar en breve a las órdenes de Miguel Bardem (Incautos), acompañado de los actores Federico Luppi, Ernesto Alterio, Guillermo Toledo y Victoria Abril. "Es una estupenda mujer y una fantástica actriz", dice de esta última.

Las alabanzas hacia su compañera le dan paso para hablar de las mujeres. "Han sido mi pasión", comenta en una breve, pero intensa, conversación en la que el actor repasa con memoria prodigiosa, humor y cierta nostalgia los momentos de su vida que se niega a olvidar: "Cómo no recordar mis años de juventud en los que recorrí los cabarés de Madrid y tuve mujeres maravillosas a mi lado. Ahora estoy solo y por las noches echo de menos a una compañera. Son cosas de la edad. ¿Quién va a querer estar conmigo? Las que me gustan no me hacen caso y las otras no me interesan".

Quedan pocos puntos del territorio español que Manuel Alexandre no haya recorrido con las compañías de teatro en las que se fue forjando como actor. "Hubo años en los que llegué a participar en una decena de películas".

Pese a ello, no le ha sobrado el dinero: "Había épocas en las que no se ganaba mucho y el trabajo era a salto de mata. La etapa de mi vida con más dinero fue cuando rodaba la serie de televisión Los ladrones van a la oficina, de Miguel Ángel Díez, ¡tres años y medio seguidos trabajando es algo increíble para un actor!".

Le gustan los premios

A Manuel Alexandre, que reconoce que se metió en este oficio por casualidad, le gustan los premios. "Cómo voy a decir que no, a todos nos halagan, aunque hubiese preferido recibirlo a los 40 años. He recogido una docena a lo largo de mi vida y todos están en poder de mis familiares. Aquí no los puedo tener", manifiesta mostrando el espacio en el que reside, un pequeño y austero apartamento de Madrid.

No sabe qué dirá cuando recoja en la gala de los Goya el premio a su trabajo, "siempre he improvisado y eso es lo que haré", asevera. Habla de la situación del cine español y dice que la crisis actual se asemeja a otras dos que se registraron el pasado siglo.

Alexandre no se acerca a las salas de cine, pero eso no le impide estar informado. Reconoce que sabe que hay gente estupenda, nuevos directores que no lo están haciendo nada mal. "Hay directores con talento y ojalá hubiese muchos como el manchego [en alusión a Pedro Almodóvar], no es que yo tenga devoción por él, pero sé que detrás de sus trabajos hay un buen director y guionista".

De todas las películas que ha visto sólo quiere citar una, el mítico filme que reunió a Ingrid Bergman y Humphrey Bogart bajo las órdenes de Michael Curtiz, "Casablanca, siempre Casablanca".