Un monolito evoca al concejal de Viladecavalls asesinado por ETA

El secretario general del PP, Javier Arenas, y miembros del partido en Cataluña y del resto de las fuerzas políticas de los ayuntamientos de Terrassa y Viladecavalls participaron ayer en un acto en recuerdo del concejal de esta última población Francisco Cano, asesinado por ETA hace dos años en Terrassa. En su memoria se inauguró un monolito en el lugar en el que fue asesinado; asimismo se celebró un concierto y se ofició una misa en recuerdo de esta víctima de ETA, gestos que su familia agradeció. En el acto participaron la viuda y las hijas del concejal.

Al terminar el acto, el secretario general del PP, Javier Arenas, aseguró estar "muy unido" a la familia de Francisco Cano y comentó que sentía la "obligación de honrar su memoria".

El 14 de diciembre de 2000, a las 10.45 horas, la furgoneta que conducía Cano explotó en la confluencia de la calle de Milans del Bosch y la Ronda de Ponent, en el barrio de Can Boada de Terrassa. En la furgoneta los terroristas habían colocado una bomba lapa con cuatro o cinco kilos de explosivo. La explosión se produjo en un tramo de fuerte pendiente que activó el sistema de péndulo de la bomba, colocada bajo el asiento del conductor.