Colapso en Boí Taüll tras cerrar dos días la estación de Baqueira

Un auténtico colapso se produjo ayer en la estación de esquí de Boí Taüll, donde los vehículos debieron ser retenidos en el Pla de l'Ermita puesto que el aparcamiento de las pistas estaba completamente lleno. El buen tiempo y la excelente nieve de que dispusieron las instalaciones pirenaicas durante todo el fin de semana comportaron que a algunas estaciones invernales acudiese un exceso de aficionados al esquí.

El aluvión de esquiadores en Boí pudo ser una consecuencia de que el jueves y el viernes, día de la Constitución e inicio del puente laboral, la estación de Baqueira tuvo que cerrar en sus cotas altas por culpa de una fuerte ventisca. Aunque ayer las instalaciones de la Vall d'Aran volvieron a abrir todas sus pistas al 100% de su utilización, algunos aficionados a la nieve prefirieron asegurar la jornada en una estación cercana.

El puente de la Constitución supuso el inicio de la temporada para muchos aficionados. La mayoría de instalaciones invernales se llenaron. En Cerler, ayer, se alcanzó la cifra de 5.864 usuarios, cantidad que se quedó a sólo 100 esquiadores del récord de la estación.