Apoyo a la Ley de Calidad

En referencia a una Carta al Director publicada el pasado día 9 de octubre en su periódico, en la que se cuestionaba el apoyo a la Ley de Calidad de la Educación, me gustaría aclarar que dicha ley cuenta con el apoyo de numerosas organizaciones del sector educativo.

Estas organizaciones comparten las líneas básicas del proyecto, que contribuirá a reducir el fracaso escolar, que es hoy del 25%, superior a la media de la UE; a mejorar el nivel de conoci

mientos de nuestros alumnos; a recuperar la cultura del esfuerzo y de la evaluación; y a mejorar las condiciones para el desarrollo de la función docente.

De hecho, el pasado 26 de septiembre, 40 organizaciones educativas de toda España, tanto de la escuela pública como de la concertada, manifestaron expresamente en un acto público, y ante los medios de comunicación, su apoyo a la Ley de Calidad. Entre ellas, se encuentran sindicatos docentes de la escuela pública y concertada como ANPE, CSI-CSIF, USO, FSIE, USPL o CSIT; asociaciones de padres como CONCAPA, COFAPA o FAPEL; asociaciones de alumnos como CES; diversas asociaciones de profesores y organismos profesionales, entre ellos, el Colegio de Doctores y Licenciados; la Asociación Nacional de Catedráticos de Bachillerato o la Asociación de Profesores de Secundaria; diversas asociaciones profesionales de distintas especialidades, como de Estudios Clásicos, Matemáticas, Música, Geografía e Historia, Física y Química, Humanidades...; y entidades de gestión como Educación y Gestión; FERE, CECE y ACADE. Todas ellas comparten la necesidad de mejorar el sistema educativo actual para satisfacer las demandas de las familias españolas. Por último, me gustaría hacer referencia también a que según una reciente encuesta del Colegio de Doctores y Licenciados, el 75% de los docentes está a favor de la reforma educativa. Otra encuesta realizada a más de 10.000 profesores de toda España por el sindicato ANPE mostró también que la mayoría de los docentes apoya las principales medidas de la Ley, como la eliminación de la promoción automática, la recuperación de los exámenes de septiembre, la Prueba General de Bachillerato o los itinerarios.