La tormenta roja vuelve a Buñol
Unos 30.000 participantes entablan una 'batalla' sin cuartel con 12.000 kilos de tomate
Las tormentas de los últimos días dieron paso a una torrencial lluvia de tomates durante la celebración de la popular Tomatina de Buñol. De doce a una del medio día de ayer, 120.000 kilos de esta preciada hortaliza inundaron la calle principal de la localidad. Cinco camiones actuaron como nube que transportó el tomate que se derramó entre los más de 30.000 participantes en esta fiesta conocida internacionalmente. Jóvenes y mayores de Japón, Estados Unidos o Argentina, además de diversos países europeos, no se quisieron perder esta cita.
La tradición de más de 50 años se ha respetado al máximo pero la fiesta ha comenzado antes de lo habitual pues la gran cantidad de personas atraídas por la Tomatina, ya llenó las calles buñolenses la noche del martes. Tras el popular reparto de bollos y vino, que fueron visto y no visto, multitud de jóvenes intentaron conseguir el jamón situado sobre el palo enjabonado que supone la antesala de la Tomatina. Después, a las doce una carcasa inició la tormenta roja y durante una hora la pulpa y el jugo de tomate inundaron Buñol. A la una todo finalizó, los participantes acudieron a las numerosas duchas que habilita el Ayuntamiento, y la brigada municipal, acompañada por la comisión de fiestas y numerosos vecinos, se encargaron de dejar la calle impecable en apenas una hora.
La Tomatina transcurrió con normalidad, solamente cabe lamentar algunos heridos leves y una joven que sufrió una caída al intentar subir a un camión en marcha, según informaron los servicios sanitarios. Entre las anécdotas está la visita de una delegación de la ciudad italiana de Ivrea para comprobar cómo se hace la Tomatina en comparación con su Batalla de la Naranja, que se celebra en febrero.
Para proteger la Tomatina, el Ayuntamiento ha registrado este año la marca y tiene los derechos de imagen y explotación, según informa la concejal de Cultura, Maribel Ferrer. Por otra parte se ha solicitado la declaración de fiesta de interés turístico internacional aunque, popularmente, esta categoría ya la tiene la Tomatina.

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