La huelga general

Quiero felicitar a los sindicatos por el éxito de la huelga general, por la práctica ausencia de problemas en la jornada del 20-J, por respetar el derecho a trabajar de todo aquel que ha querido hacerlo y, sobre todo, por haber plantado cara a la derecha. Y esto último es importante, pues el Gobierno del señor Aznar ha demostrado grandes dotes de manipulación, una gran carga de soberbia, una extraordinaria fortaleza con los débiles y debilidad con los fuertes, un auténtico desprecio por la negociación y sus adversarios políticos y sociales y una impresionante falta de escrúpulos a la hora de hacer política.

Confío que esta huelga sea el principio de una movilización más general, de ámbito europeo, que frene la derechización del viejo continente, que entre otras muchas cosas se traduce en la eliminación de gastos sociales y el paulatino abandono de los sectores más débiles de nuestra sociedad.- José Luis Fernández Iglesias. Madrid.

¿Cabe un telepanfletario más sesgado, bochornoso, indignante y dañino que los de sobremesa y prime time con que nos obsequió TVE el día de la huelga general del 20-J? Lo ocurrido va más allá de todo decálogo de profesionalidad periodística. Asistimos a una permanente agresión a nuestra democracia por parte de quienes la han de fortalecer. La democracia no es sólo forma, sino también ética y pedagogia, pero incluso la forma está siendo violada. Los ciudadanos tenemos el derecho a elegir el o los medios de comunicación por los que nos queremos informar. La televisión pública, tanto más la pública, tiene el deber de acatar la Constitución e informar con veracidad y haciéndose eco del pluralismo (artículo 20). A falta de vergüenza política y de respeto a la ciudadanía, tal vez sea hora de que la justicia sancione el uso fraudulento que de TVE hacen los responsables de confianza del PP que la dirigen. Es obvio que el Parlamento ha dejado de ser la instancia adecuada.- Rafael Durán Muñoz. Málaga.

Soy una asidua lectora que hoy he decidido mostrar mi descontento con los acontecimientos que se están desarrollando en torno a la huelga ¿general?

He podido comprobar que en muchos casos no se ha respetado el derecho al trabajo y sólo espero que en las cifras que agrupan a los que han decidido ejercitar su derecho a la huelga no incluyan a aquellos que se han visto obligados a secundarles.

He tenido la sensación de estar viviendo una marcha atrás al tener problemas, e incluso pasar miedo, al ir a hacer la compra o al ver cómo los comerciantes encontraban las cerraduras de sus negocios bloqueadas con silicona o los escaparates rotos.

Quizás esta vez los sindicatos han olvidado que deben representar a los trabajadores, no a sus líderes.- Paloma Orozco. Madrid.

Me disfracé de masa, me vestí de gente y un día más, como si nada ocurriera, he ido a trabajar. Es 20 de junio.

Inquietante jornada la de este día para los que, estando de acuerdo con la huelga, decidimos no secundarla, sintiendo en el estómago el golpe bajo de la inconsecuencia y la náusea de lo contradictorio en la garganta.

¿Motivos? Cada cual los suyos.

¿Denominador común? El día después... la represalia... la fragilidad del contrato de trabajo... y en algún caso la expresa prohibición del empresario de ejercer el derecho a la huelga. Trabajadores que sí parásteis el 20-J, perdonad mi abandono. Os aseguro que en el pecado llevé la penitencia. Fue la jornada más larga.- Margarita Domínguez Carril. Tres Cantos, Madrid