Fallecen arrollados por un tren dos niños de un barrio de chabolas de Madrid

Dos primos hermanos, Ángel Fernández Silva, de 14 años, y Fabio Vázquez Fernández, de nueve, murieron ayer arrollados por un tren de cercanías que atravesaba el barrio madrileño de Villaverde. Los muchachos cruzaron las vías por un lugar indebido aprovechando un hueco entre las vallas que protegen la vía, en un lugar utilizado frecuentemente como atajo.

El conductor del convoy no pudo detener el tren a pesar de que iba a escasa velocidad. Los chavales vivían en el poblado marginal de El Salobral (ocupado por unas 150 familias), cuyos habitantes exigieron a Renfe un paso elevado para que no se repitan accidentes similares.

Los dos primos salieron del poblado a las 11.30. Se dirigían al barrio de San Cristóbal de los Ángeles para cortarse el pelo. Utilizaron el camino habitual para atajar, que consiste en cruzar las vías del tren junto al puente de la carretera de Andalucía, a 800 metros de la estación de San Cristóbal Industrial. Para colarse en las vías utilizan cuatro agujeros que tiene la valla metálica que protege el trayecto ferroviario.

Los chavales comenzaron a cruzar cuando un tren de pasajeros de la línea de cercanías C-3 (Atocha-Aranjuez) les arrolló. El convoy salía de una curva muy cerrada que rodea el Centro Logístico de El Salobral y la escuela militar. Esto impidió que el conductor viera a los menores. El tren les arrolló y los mató en el acto. Sufrían traumatismos craneoencefálicos muy graves y politraumatismos severos, lo que hacía imposible su reanimación, según señaló un portavoz del Samur-Protección Civil.