El alcalde de Tarragona promete trasladar la perrera a un lugar más seguro

Los responsables de la asociación protectora de animales de Tarragona, cuyos edificios fueron asaltados el pasado sábado, se reunieron ayer con el alcalde, Joan Miquel Nadal, y le arrancaron el compromiso de encontrar un emplazamiento más seguro para sus instalaciones. Nadal se comprometió a proponer un nuevo emplazamiento antes de 21 días y evitar así un nuevo episodio como el del pasado fin de semana, cuando unos desconocidos penetraron en la perrera y mutilaron brutalmente a 15 de los perros, lo cual obligó a sacrificarlos. El cambio de ubicación de la perrera era una antigua petición de la protectora de animales, que ya había denunciado la inseguridad de sus instalaciones. Joan Miquel Nadal se mostró convencido de encontrar una solución y admitió la falta de celeridad en trasladar la perrera. 'Siempre surgen problemas', afirmó.

Mientras tanto, agentes del grupo de la policía científica y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil volvieron ayer a inspeccionar las instalaciones de la protectora de animales en busca de huellas dactilares o cualquier otra pista que pueda conducir a la detención de los autores del ataque de la mutilación de los perros. El desconcierto continúa y parece que no existen testigos oculares de los hechos que causaron la muerte de los animales, porque la protectora está en un descampado en el término de Reus. Sin embargo, los investigadores están analizando las huellas dactilares que ya han encontrado y dos objetos también localizados en el recinto: un cuchillo de ciertas dimensiones y un hacha, que pudieron servir para cortar las patas de los animales.

Sin un móvil claro

La policía sospecha que la agresión contra los animales fue consecuencia de un acto de puro vandalismo, una gamberrada que quizá llegó demasiado lejos. No se descarta tampoco la hipótesis de que las mutilaciones formaran parte de un acto ritual e incluso que se trate de un macabro juego de rol, pero los investigadores piensan que en este caso los atacantes habrían recogido las extremidades de los animales.

No obstante, la policía localizó todas las patas delanteras mutiladas dentro de las instalaciones de la protectora. El alcalde lamentó los hechos y explicó que 'causan un daño a la imagen de la ciudad'. Nadal, ante la gravedad del ataque, hizo también un llamamiento a la reflexión ciudadana porque, señaló, 'valdría la pena que la ciudadanía entera se reuniese y dijese: '¿Pero hacia dónde vamos?'.

El Colegio de Veterinarios de Tarragona emitió un comunicado de condena enérgica del 'brutal y violento atentado'. El escrito insta además al Ayuntamiento a asumir sus responsabilidades en materia de recogida y custodia de animales perdidos y abandonados.

El consejero de Justicia, Josep Delfí Guàrdia, se sumó a la condena de los hechos y pidió que en este caso 'las sanciones vayan más allá de las multas'. Pero Guàrdia matizó: 'Desde un punto de vista humano es una barbaridad, pero no se deben hacer valoraciones penales en caliente'.

La responsable de la protectora de Tarragona, Ana Duch, se ha mostrado convencida de que si la perrera hubiera estado mejor protegida, 'no se habría podido acceder tan fácilmente'.