La policía de Congo detiene a decenas de niños de la calle

Decenas de niños de la calle fueron arrestados en una redada policial en Kinshasa, capital de la República Democrática de Congo, después de que un agente matase a tiros a un niño al que vio robar, según informó ayer la BBC, que citó como fuente a testigos del suceso.

Al ser descubierto robando en el mercado central de Kinshasa, el niño arrojó agua hirviendo de un puchero de cocina a un agente de policía y después intentó escapar. El policía sacó su pistola y disparó. Decenas de furiosos niños de la calle que deambulaban por la zona intentaron vengarse atacando una pequeña comisaría de policía situada en el mercado, lo que causó el pánico entre quienes compraban. El ministro de Información de Congo, Kikaya Bin Karubi, aseguró que los niños habían herido a un policía en medio del pánico.

Los agentes usaron gas para dispersar a los menores y en los 30 minutos que tardaron en restablecer el orden, muchos comerciantes perdieron gran cantidad de sus productos a manos de saqueadores. No está claro si alguno de los niños resultó herido. 'Al menos 78 de ellos han sido arrestados', señaló Amigo Gonde, de la Asociación Africana para la Defensa de los Derechos Humanos. 'Conociendo la forma en que la policía opera aquí, serán maltratados seguro', dijo.

Una gran parte de la infraestructura de la República Democrática de Congo quedó colapsada durante la pasada década y muchos residentes luchan por sobrevivir.

Según datos de la Fundación de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), hay 15.000 niños viviendo en las calles de Kinshasa en condiciones terribles: sólos, víctimas de la pobreza, la corrupción, el sida y las guerras.