Alcobendas supera durante una hora el 'umbral de aviso' de ozono troposférico

Las ola de calor, en infeliz combinación con la contaminación generada por coches e industrias, ha comenzado a hacer de las suyas en la región un verano más. Alcobendas superó ayer, entre las siete y las ocho de la tarde, el llamado umbral de aviso en el nivel de ozono troposférico, un gas nocivo para la salud (al contrario que el que configura la capa de ozono), que se forma al mezclarse los humos de vehículos y combustiones industriales con la radiación solar, más alta en verano.

El umbral de aviso está fijado por ley en 180 microgramos de ozono troposférico por metro cúbico de aire (Alcobendas llegó ayer a 181 microgramos), y, cuando se supera, las autoridades están obligadas a informar a la población. Con esos niveles de ozono, los ancianos, niños y personas con problemas respiratorios deben evitar el ejercicio físico intenso al aire libre. Sólo a partir de los 360 microgramos por metro cúbico (umbral de alerta), el ozono troposférico es peligroso seriamente y para toda la población, lo que exige medidas más drásticas (por ejemplo, de limitación del tráfico) por parte de las administraciones.

También Alcalá de Henares superó, el pasado 31 de mayo, el umbral de aviso de ozono, con 187 microgramos por metro cúbico.