Medved: 'He perjudicado al club quedándome embarazada'

Pese a su embarazo, la balonmanista Tania Medved continuará vinculada a El Osito L'Eliana, actual campeón de la liga de División de Honor, aunque su cometido será diferente al que hasta ahora desempeñaba. Medved, a quien el club valenciano ha rescindido el contrato por quedarse embarazada, colaborará en las oficinas o en cuestiones técnicas, tal y como comunicó ayer la entrenadora de El Osito y también seleccionadora nacional, Cristina Mayo.

'Mi deseo es quedarme en Valencia y seguir jugando en el club. Por eso creo que es justo renunciar a una parte del contrato, pues me he quedado embarazada en un momento inoportuno', afirmó ayer Medved, cuyo contrato incluía una cláusula que especificaba que, en caso de embarazo, sería despedida, extremo que confirmó ayer Mayo y la presidenta de la Asociación de Jugadoras de Balonmano, Mercedes Fuertes.

'Por un lado estoy feliz porque tenía ganas de tener un niño; por otro no, porque soy una jugadora profesional y sé que he perjudicado al club. Yo también quería ganar este año la liga y la Copa de la Reina', aseveró Medved, de 26 años, quien hace 15 días jugó un partido de la Copa de Europa estando ya embarazada de unos dos meses. 'Hubiera jugado más encuentros, pero el club no me ha dejado'.

Cristina Mayo reveló ayer que incluir en los contratos la cláusula que ha desatado la polémica en el deporte femenino es una práctica habitual: 'Está copiada de los contratos internacionales de la EHF '. 'Soy favorable a este tipo de cláusulas, aunque desconozco si son legales o ilegales', asegura Medved.

El caso ha destapado la precariedad en la que se encuentran los clubes de la División de Honor de balonmano femenino. 'Los equipos no tienen apenas recursos. Hay jugadoras en División de Honor que apenas ganan 30.000 pesetas al mes. La mayoría de jugadoras son aficionadas, sin contrato', afirma Mercedes Fuertes.