Los nacionalistas del Istiqlal se desmarcan de la coalición que gobierna en Rabat

El partido nacionalista Istiqlal, principal partido que apoya a la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP) en la coalición gubernamental que dirige Abderramán Yusufi, comienza a distanciarse de sus aliados en la campaña de sanciones contra la prensa independiente. Las juventudes del Istiqlal, que representan una de las ramas más activas del movimiento nacionalista marroquí, emitieron ayer un comunicado en el que calificaban la prohibición de los semanarios Assahifa, Le Journal y Demain, como "injusta y arbitraria".Los jóvenes nacionalistas insisten en su reclamación de derogar el actual Código de la Prensa, que ha servido de base al Gobierno de Yusufi para tomar la decisión de censurar definitivamente las citadas publicaciones. "La consolidación del Estado del derecho no puede hacerse basándose en medidas coercitivas", afirma el editorial del diario nacionalista L'Opinion, refiriéndose a la reacción gubernamental frente a las tres revistas sancionadas.

Otro miembro de la coalición gubernamental, el Partido del Progreso y del Socialismo (PPS, ex comunistas), también se ha desmarcado del jefe del Ejecutivo.

Tras la manifestación de más de un centenar de periodistas de diversos medios de comunicación en contra de la medida gubernamental, diversos medios de prensa han expresado su rechazo al cierre de los semanarios y su preocupación por el precedente sentado por el Ejecutivo.

La mayoría de los diarios que aparecen en Rabat y Casablanca han coincidido en reclamar que sea la justicia la que determine si existe o no delito en la publicación por los semanarios Le Journal y Assahifa de la carta del veterano militante Mohamed Basri, que desveló la complicidad de la dirección socialista -y en especial del actual primer ministro- en el golpe militar destinado a derribar al rey Hassan II en 1972.