Dos Hermanas y Sevilla

El alcalde de Dos Hermanas ha lanzado a pelear a los pueblos: al suyo contra el de Sevilla. Era lo menos que cabía esperar desde que empezó con su contraproducente exigencia de quitarle a Sevilla un pellizco de su término municipal para aumentar su población en más de 50.000 habitantes y así cobrar más del Estado.Aunque, de verdad, de verdad, no soy el único que piensa si el verdadero interés de Toscano es cobrar más o hacer que Sevilla cobre menos. Eso está por ver. Porque está claro que, suponiendo que consiguiera su oscuro objetivo, también tendría que invertir más en los nuevos barrios (nuevos para Dos Hermanas). Claro que si piensa atenderlos como atiende a Montequinto o a Fuentedelrey, ya se explica todo.

El caso es que ha echado a pelear a los pueblos, como digo, que ha animado a algunas asociaciones para que le dirijan escritos, adhiriéndose a su "afán conquistador", para hacer que su petición ya no sea suya, sino "de todo el pueblo". Resulta deprimente, cómico, absurdo, que se utilice de esta manera al pueblo para unos intereses personales y para hacer daño a los demás.

Desde luego, la respuesta que se merece es que todas las asociaciones de Sevilla dirijan cartas al alcalde para pedirle que pida la devolución de todo el término de Dos Hermanas, que perteneció en su momento a nuestra ciudad y que fue desgajado por un decreto anterior al que sumó a Sevilla el trozo de término que Dos Hermanas no quería.

Es la respuesta que se merece. Espero que las organizaciones ciudadanas de Sevilla se movilicen.- Manuel Rodríguez Blasco. Sevilla.