Italia convoca al embajador holandés por la detención de un equipo de la RAI

Italia ha aceptado la derrota ante Francia en la Eurocopa 2000 pero no la dureza de la policía de Rotterdam que maltrató a un grupo de periodistas de la RAI el pasado domingo a la entrada del estadio de Rotterdam donde se celebró la final. El ministro italiano de Exteriores, Lamberto Dini, convocó ayer tarde al embajador holandés en Roma, Christiaan Kroener, para expresarle la protesta oficial del Gobierno y exigir una investigación a fondo sobre lo ocurrido. En el Parlamento Europeo, los representantes italianos presentaron una protesta oficial que será debatida el jueves. El incidente en el que se vieron envueltos 350 minusválidos italianos, que viajaron de Roma a Rotterdam como invitados de honor de la Federación de Fútbol para animar a la selección nacional, degeneró casi en una batalla campal y terminó con siete periodistas de la Radiotelevisión pública italiana (RAI) en comisaría.Todo empezó cuando los voluntarios de Unital que acompañaban a los minusválidos se dieron cuenta de que los sitios reservados al grupo dentro del estadio de Rotterdam eran inaccesibles para personas que se desplazan en sillas de ruedas. Las protestas sirvieron de poco y algunos de los voluntarios optaron por cargarse sobre los hombros a los desilusionados invitados. Momento en el que un grupo de siete periodistas y operadores de la RAI (el viaje especial había sido profusamente anunciado en la información del encuentro) comenzaron a filmar el suceso. La policía les prohibió hacerlo y comenzó una discusión que terminó con un periodista herido y los siete integrantes del equipo de la RAI detenidos.

Las autoridades holandesas respondieron ayer con frialdad a las protestas italianas. Un portavoz del Ministerio de Exteriores holandés aseguró que la nota de protesta "será tomada en la consideración oportuna" y será respondida a la mayor brevedad, "cuando se reciba".