El fiscal de Jaén rechaza que una madre biológica recupere a su hija

La Fiscalía y la Junta de Andalucía pidieron ayer a la Audiencia de Jaén que no devuelva a su madre biológica a la niña de nueve años dada en adopción ilegal por parte de la Administración autónoma. Una sentencia del Tribunal Supremo declaró ilegal la adopción (por haber sido firmada la entrega de la niña antes de que naciera) y recordó al fiscal su función de "vigilante de la legalidad". La Audiencia de Jaén tendrá que decidir ahora el futuro de la menor tras la vista de ayer y una vez que, en cumplimiento de la orden del Supremo, se practicó la prueba del ADN, a la que se oponía la Junta y que ha confirmado la relación materno-filial. El fiscal Cristóbal Fábregas alegó que la niña vive con la familia que la adoptó, por lo que "no es el momento" de que viva con su madre ni de que se establezca algún régimen de visitas que permita a ambas conocerse.

En cambio, el abogado de la mujer, Francisco Herrera, tras recordar que el Supremo declaró nula "de pleno derecho" la entrega en adopción realizada por la Junta de Andalucía, defendió ante el tribunal que "se debe devolver la niña a su madre", y añadió: "Otra cosa es ver cómo se hace".

"Otro sacrificio más"

Herrera aseguró que la madre biológica está dispuesta a "otro sacrificio más" y renunciar a su derecho a vivir con la niña, a cambio de un régimen de visitas. El abogado declaró que no se desea causar ningún perjuicio a la menor ni a la familia adoptiva, pero que no puede mantenerse a la niña con ésta basándose en que lleva nueve años conviviendo con ellos. Eso sería tanto, indicó, "como amparar una vulneración de la ley argumentando que han transcurrido demasiados años".

El letrado recordó que la mujer pidió ayuda a la Junta cuando estaba embarazada y le hicieron firmar la renuncia a su hija. Después de dar a luz, reclamó a la niña y el juez le dio la razón, pero la Audiencia siguió el criterio de la Junta y del fiscal, a los que el abogado acusó ayer de "todo el sufrimiento" padecido por esta mujer, hasta que el Supremo le dio de nuevo la razón.