¿Por qué hay que ir a la escuela?

A la pregunta de ¿por qué hay que ir a la escuela? que formulan las investigadoras, los niños responden de muy diferente manera según pertenezcan a entornos marginados o a familias de clase media u obrera.Éste es el diálogo de Juan, un chaval de seis años en desventaja, con la psicóloga.

Psicóloga. ¿Por qué hay que venir al colegio?

Juan. Por el recreo.

P. ¿Y por qué hay que venir al recreo?

R. Porque no hay que saltar la valla.

P. ¿Por qué hay que saltar la valla? ¿Qué pasa si la saltas?

R. Que molestas a los demás.

P. ¿Hay que venir al colegio por algo más?

R. No

P. ¿Si no existieran los colegios, qué pasaría?

R. Que no vendríamos.

P. ¿Pasaría algo más?

R. No

Muy diferentes son las constestaciones de Ana, de la misma edad, y de un ambiente culturalmente privilegiado.

Psicóloga. ¿Por qué hay que venir al colegio?

Ana. Si no vienes no estudias.

P. ¿Y si no estudias, qué pasa?

R. Que no sabes leer.

P. ¿Y si no sabes leer qué pasa?

R. Que te pregunta la señorita y no lo sabes.

P. ¿Y fuera del colegio para qué sirve leer?

R. Para leer los carteles y saber las calles y las señales.

P. ¿Y si no vinieras al colegio te pasaría alguna otra cosa?

R. Que luego no podrías ganar dinero.

P. ¿Y si no existieran los colegios qué pasaría?

R. Todo el mundo se quedaría sin dinero y tendría que pedir limosna.