El juez condena a Feria Valencia por por impedir una gala de los Octubre

El titular del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Valencia, Víctor Gómez Saval, ha condenado a la Feria de Valencia a indemnizar con 25 millones de pesetas a la Fundació Ausiàs March, que no pudo organizar la gala de los Premis Octubre de 1997 porque la institución le negó la cesión del recinto comprometido. El juez, en un fallo en el que no entra a valorar las razones del incumplimiento, explica que la Feria había accedido a alquilar sus instalaciones para el evento. La Fundació, en su día, acusó al PP de impedir la celebracion.

La Feria de Valencia -por aquel entonces Feria Muestrario Internacional de Valencia- comunicó a finales de septiembre de 1997 a la Fundació la imposibilidad de cederle el recinto previsto, un pabellón capaz de albergar a 2.000 personas, en la fecha pactada, el 25 de octubre. Según explicó entonces el director de la Feria, Rafael Olcina, la cesión acordada fue revocada por la necesidad de disponer del local para celebrar la fiesta anual de la Cámara de Comercio de Valencia, que debía ser ese mismo día por los problemas de agenda del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. Olcina ofreció a la Fundació Ausiàs March otras alternativas.Los organizadores de los Premis Octubre rechazaron esa posibilidad porque los locales ofrecidos no se ajustaban a las necesidades del acto, que iba a contar con las actuaciones de Lluís Llach y Carles Santos, iba a ser retransmitido por TV-3 y tenía previsto congregar, como siempre, a una amplia representación del mundo de la cultura.

El organizador de los Premis de literatura en catalán, Eliseu Climent, achacó la decisión de la Feria a la "pantanada de intolerancia del PP". El responsable de la editorial Tres i Quatre arremetió contra la "limpieza etnocultural del pueblo" desarrollada por el PP y, después de anunciar la suspensión del acto por la imposibilidad de encontrar el recinto adecuado, anunció una reclamación por vía judicial.

Ésta ha dado sus frutos. Gómez Saval condena a la Feria a indemnizar con 25 millones de pesetas a la Fundació Ausiàs March, ya que considera que esa institución se "comprometió a ceder a la Fundació un espacio apto para llevar a cabo en él, en determinada fecha, la cena, gala y entrega de los Premis Octubre y su posible retransmisión televisiva".

El juez, en una extensa sentencia, reconoce "la inexistencia de un acuerdo formalmente documentado" -un contrato-, pero añade que en las tres cartas remitidas por Climent a Olcina y Antonio Bauxali (ex presidente de la Feria), y en una posterior misiva remitida en sentido contrario, queda reflejada "la conformidad y consentimiento contractual a la cesión del local".

Así lo prueban las reuniones mantenidas por varios técnicos para preparar un acto de cierta complejidad. Además, el magistrado señala que el acuerdo "puede existir aunque no se formalice", tal como sucedió en algunas otras de las galas, que se llevaron a cabo pese a la ausencia de contratos.