Retrasos de 6 horas en el aeropuerto de Barcelona a causa de la nevada

La espectacular nevada que sorprendió ayer a la ciudad de Barcelona y su área metropolitana alteró la vida cotidiana y causó problemas en las carreteras y el aeropuerto de El Prat, que llegó a acumular retrasos de hasta seis horas en las llegadas y las salidas de los aviones.Desde las cuatro hasta las seis de la mañana permanecieron cerradas dos de las pistas del aeródromo para que pudieran ser limpiadas por las máquinas quitanieves. Dos coches de los bomberos ayudaron a los técnicos a lanzar una solución de agua y alcohol sobre el fuselaje de los aviones para evitar la formación de placas de hielo.

Las demoras en las operaciones aéreas se prolongaron durante toda la mañana. Un grupo de 18 reporteros de la asociación Periodistas Europeos de Cataluña firmó un manifiesto para expresar su queja por la falta de información por parte tanto de la compañía Iberia como de la dirección del aeropuerto. También pidieron la mejora de los "canales de información a los usuarios".

Barcelona, que no había vivido una nevada tan intensa desde hacía seis años, también vio cortadas durante varias horas algunas carreteras de acceso a la parte alta de la ciudad, entre ellas la de la Vallvidrera y la Rabassada. También se restringió el tráfico en la montaña de Montjuïc, donde por la mañana un autocar de turistas norteamericanos patinó y chocó contra un turismo y posteriormente contra un árbol. Tres pasajeros, de edad avanzada, tuvieron que ser atendidos en el hospital Clínico, aunque fueron dados de alta enseguida.

Plan de alerta

A primera hora de la tarde, cuando los rayos de sol se dejaron ver entre las nubes, la ciudad y su área metropolitana comenzaron a recuperar la normalidad. La nieve, que había cuajado alcanzando los dos centímetros de grosor, empezó a derretirse. Pero, pese a que los servicios meteorológicos no anunciaban nuevas nevadas, el Ayuntamiento mantuvo activado el plan de alerta por nieve y hielo, con lo que seguían movilizados los bomberos, la guardia urbana y los servicios de limpieza.Con la llegada de la noche el consistorio activó también la segunda fase de la Operación Frío para la acogida de indigentes en albergues municipales. La primera se puso en marcha el pasado viernes ante la invasión de aire siberiano que empezó a afectar a la ciudad.

Anoche, una patrulla de la guardia urbana, acompañada de un educador de calle, recorrió las calles de la ciudad para ofrecer a los sin techo el albergue de la avenida Meridiana.

El Ayuntamiento de la capital catalana recomendó evitar el uso de los vehículos particulares. Fuera de la ciudad, los principales problemas de tráfico se produjeron en las carreteras del área metropolitana o las próximas, entre ellas la autovía de Castelldefels y la autopista A-16 en L"Hospitalet de Llobregat.