El manifiesto de los nuevos socialdemócratas

En su manifiesto, The Youngsters (Los Jóvenes) -13 diputados de las juventudes socialdemócratas que avalan el proyecto político del canciller Gerhard Schröder-, piden una revisión cuidadosa de "lo que el Estado social puede hacer y de lo que no puede hacer", y apuestan por un sistema que "invite" a la gente a participar en la vida social, en lugar de fomentar la dependencia permanente. Quieren también sistemas de seguridad social complementarios a los del Estado y flexibilidad en los modelos de trabajo. "El cambio de las realidades exige nuevas respuestas y por eso hay que aclarar de qué modernización se trata", se preguntaba ayer Benjamin Mikfeld. "La cuestión de la modernización no es un monopolio de los que quieren una adaptación a un supuesto dictado de las cosas", señalaba el dirigente juso. Mikfeld acusaba a la "minoría" de diputados jóvenes del SPD que han firmado el documento de ignorar, "al igual que en el documento Blair-Schröder", el problema de los intereses sociales y del reparto del poder y la riqueza, que "son fundamentales para la izquierda". "Lo que parece nuevo y que marca nuevos rumbos es, en última instancia, conservador, porque el espacio del juego político está limitado por los resultados de la era neoliberal de la última década", señalaba. Según Mikfeld, la línea del enfrentamiento de los próximos años discurre entre la "modernización conservadora" de Schröder y una "modernización de izquierdas". El proyecto central de una "modernización de izquierdas" tiene que ser una estrategia para una nueva economía que integre la política de oferta y demanda de forma inteligente a lo largo de nuevos campos de crecimiento y empleo, "sin apostar por estrategias de bajo salario".