Una empresa indemnizará a la familia de un trabajador muerto

La Audiencia de Valencia ha ratificado la resolución de un juzgado de Requena que condenó a dos empresas a indemnizar con 25 millones de pesetas a la familia de un trabajador fallecido en accidente laboral. Según el fallo, Domingo Tamarit, especialista en instalaciones eléctricas, perdió la vida al precipitarse a un depósito de pasta de papel en la empresa en la que trabajaba en ese momento. Murió por asfixia y, en opinión del magistrado que ha redactado la sentencia, Domingo Boscá, su muerte hubiera podido evitarse. "Es cierto que el trabajador fallecido era experto en su trabajo, hasta el extremo de actuar bajo la absoluta confianza de sus empleadores, tanta que, al menos en este caso, no se les ocurrió nunca vigilar que las cosas se hicieran con todas las garantías posibles y necesarias", dice la sentencia. Basándose en éste y otros argumentos, Boscá confirma la decisión de su colega, que condena a los superiores de Tamarit y a los responsables de la industria en la que murió como autores de una falta de imprudencia leve. Además, ratifica la indemnización fijada: 25 millones de pesetas que beneficiarán a la mujer y dos hijas del trabajador y serán pagadas por dos compañías aseguradores.