La secuencia de la pacificación

¿Qué pasa ahora? Si el proyecto de resolución del Consejo de Seguridad supone una confirmación de la resignación rusa y de la capitulación serbia ante los aliados, la secuencia que se inicia con él se ha encadenado casi simultáneamente para dar a Moscú y Belgrado bazas con que presentarse ante sus opiniones. Los pasos son:1. Proyecto de resolución de la ONU.

Redactado ayer en Colonia. Completa la legitimación jurídica de la intervención aliada. Envía el mensaje a Milosevic de que Rusia y la OTAN han recompuesto, frente a sus obstruccionismos, la alianza forjada por Chernomirdin y Ahtisaari. Tranquiliza a todos los que reclamaban el paraguas de la ONU. Desbloquea los siguientes pasos.

2. Conversaciones militares.

Se reanudaron anoche. Los detalles "técnicos" de la retirada están muy discutidos, por lo que la aceptación de las instrucciones aliadas puede ser rápida. La OTAN será flexible en algún punto, quizá ampliando el plazo de siete días a once o doce para completar el repliegue serbio (nunca a Montenegro), 5 kilómetros más allá de la frontera de Kosovo, y 25 kilómetros para las baterías antiaéreas.

3. Inicio de la retirada.

Milosevic puede volver a alegar ante su clientela que el documento del G-8 prefigura que se rinde y se retira por orden de la ONU y no de la OTAN, si censura, como suele, el texto de los anejos, que solemnizan el papel nuclear de la Alianza en la KFOR. Para la OTAN, lo esencial es que la retirada sea primero "verificable" y luego "completa".

4.Comprobación de la retirada.

Expertos aliados calculan que se necesitan pocas horas para verificar el repliegue serbio. Entre su inicio y la comprobación, unas 24 horas, quizá menos. Único problema: como el repliegue serbio y la entrada de la KFOR no serán instantáneos, podrá producirse un corto "vacío", en el que serbios y guerrilleros cometan violencias.

5. Suspensión de los bombardeos.

Enseguida, después de verificado el inicio de la retirada. Lo anunciará el secretario general, Javier Solana, tras reunirse con el Consejo Atlántico (los 19 embajadores). Acto lógico para la OTAN tras comprobar que se cumple su condición: el inicio de la retirada. Y necesario a Rusia, China -también para aliados como Italia- que reclamaron una "pausa" antes de que la ONU bendiga toda la operación. Podría suceder hoy mismo o mañana.

6. Voto en el Consejo de Seguridad.

El G-8, las gestiones de Ahtisaari con las autoridades de Pekín, y la "pausa" previa deben garantizar que todos los miembros permanentes -no han surgido dudas sobre los rotatorios- votarán la resolución redactada en Colonia, o al menos se abstendrán, lo que le dará vía libre. Podría celebrarse el mismo día de la pausa, gracias a la diferencia horaria entre Pristina y Nueva York.

7. Despliegue de la KFOR en Kosovo.

Belgrado lo aceptó si lo respaldaba una resolución de la ONU. Todos los aliados deseaban contar con esa bendición previa, pero Francia fue la más firme en su exigencia de aplazarlo hasta contar con ella, a riesgo de que Kosovo registre "vacío de poder". Instalación del Estado Mayor en Pristina, creación de cinco sectores multinacionales -sin cotos reservados-, que incluirían fuerzas rusas. Desmilitarización del ELK.

8. Retorno de los deportados.

Inmediato y progresivo. Empieza la reconstrucción.