Chaves dice que el despegue andaluz imposibilita una emigración masiva

Las manifestaciones culturales y las expresiones lúdicas de países receptores de emigrantes andaluces reflejarán, de aquí a una década, las incorporaciones aportadas por la gente de Andalucía que emprendió el éxodo migratorio. Ante 400 emigrantes, que participan en el cuarto Encuentro Mundial de Comunidades Andaluzas, que comenzó ayer en Sevilla, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, destacó la doble vertiente realizada por el colectivo emigrado: el desarrollo de fenómenos culturales andaluces sin "perder las señas de identidad" y la incorporación de éstos a la cultura de las sociedades de acogida. El éxodo masivo vivido en Andalucía, sin embargo, "no sería posible" hoy. Chaves se amparó en el "salto de gigante" de la Comunidad Autónoma para sostener la imposibilidad de que se repitiese un fenómeno migratorio semejante. El presidente andaluz, además, hizo hincapié en la pérdida del concepto de emigrante, tal y como se concebía hace unas décadas, por mor de la eliminación de fronteras en Europa. "Los emigrantes andaluces en Europa o Cataluña ya no pueden considerarse emigrantes, más bien ciudadanos del mundo", dijo. Esta difuminación del carácter de frontera no significa, según advirtió, la completa desaparición de situaciones de marginación o desigualdad. Receptor Los asistentes a este encuentro proceden de numerosos territorios como Australia, Estados Unidos y, sobre todo, países latinoamericanos y europeos. También están representados centros y asociaciones de andaluces afincados en otras comunidades autónomas. Ante ellos, Chaves describió el nuevo papel de Andalucía, que ha mudado su papel de foco emigratorio por el de receptor de inmigrantes, sobre todo procedentes del Magreb y del África subsahariana. "Y eso no está exento de problemas", sentenció. Después de lamentar que el trabajo que desempeñan los inmigrantes africanos no siempre se realiza "en las condiciones deseables", el presidente andaluz defendió su visión del Estrecho como un puente de "unión y cooperación" con su orilla Sur. "No queremos que se convierta en un muro", dijo. El impulso de políticas de cooperación con los países de la cornisa magrebí constituye, según Chaves, el mejor método para ayudar a que potencien su economía "sin tener que venir a Andalucía en condiciones precarias o dejando su vida en el Estrecho". Junto a esta emigración generada por razones económicas, el presidente andaluz recordó la generada por razones políticas o, directamente, purgas étnicas, como la que sufren miles de albanokosovares. Durante la inauguración del encuentro, que se celebrará hasta el 21, Chaves entregó el premio Comunidades Andaluzas 1999 a la peña flamenca cultural recreativa de Cerdanyola (Barcelona), por la actividad desplegada desde que se constituyó hace 12 años. Este galardón es convocado por la Consejería de Cultura.