El candidato árabe se retira para facilitar el triunfo laborista en Israel

Azmi Bishara, el aspirante árabe a primer ministro en Israel, retiró ayer por la tarde su candidatura para que la izquierda pueda triunfar más fácilmente el próximo lunes en las elecciones generales. La retirada del candidato favorece al candidato laborista, Ehud Barak, quien, según los últimos sondeos, se colocaría a pocos miles de votos de conseguir la mayoría simple en la primera vuelta de las elecciones, derrotando al candidato de la derecha, Benjamín Netanyahu.El excandidato árabe-cristiano,de 43 años de edad, profesor de Ciencias Politicas, se había presentado a las elecciones en un gesto testimonial, para demostrar a las minorías no judías de Israel que pueden ejercer sus derechos políticos en el país, a pesar de las dificultades, y reclamó que Israel sea un Estado de todas las comunidades.

Azmi Bishara se ha retirado tras largas negociaciones con el partido de Barak, que ha decidido recoger algunas de las reivindicaciones de la comunidad árabe israelí, que representa un 18% de la población. Con su decisión se trasvasará a Barak aproximadamente un 2,5% de los votos, con lo que el candidato laborista se coloca, según estos pronósticos, a escasas décimas del 50% de los sufragios.

La retirada de Bishara provocará seguramente, en las próximas horas, el repliegue del candidato de la extrema derecha Beni Beguin -Unidad Nacional-, al que los sondeos otorgaban el 1,5% de los votos, y que irán directamente a engrosar el debilitado patrimonio de Benjamín Netanyahu, a quien las encuestas aseguran un 39% de papeletas.

La clave del triunfo seguro de Barak en la primera vuelta de las elecciones depende exclusivamente de la decisión de Isaac Mordejai, el candidato de centro, quien se niega por el momento a retirarse.