Los ecos de "Tubular Bells"

El músico británico Mikel Olfield no lidiará toros, pero casi. Confrontará su nuevo trabajo Guitars con el público donostiarra en el coso taurino de Illumbe el próximo 1 de julio. Iniciará así un periplo promocional que le llevará por escenarios de toda España, acompañado del grupo gallego Luar Na Lubre como telonero. Oldfield (Gran Bretaña, 1953) recala en San Sebastián dentro de los actos del centenario del Banco Guipuzcoano y de la mano de la empresa Get In. Su responsable, Iñigo Argomaniz, adelantó que el músico británico utilizará en su concierto el mismo sistema de sonido que emplea Bob Dylan y que puso de moda el francés Jean Michel Jarre, que se adecúa específicamente a cada recinto. Tan sólo será preciso que durante estos dos meses los técnicos de Illumbe se afanen en mejorar la acústica del coso, que no estuvo totalmente lograda, según Argomaniz, en la actuación de Bryan Adams el pasado sábado. En total, 10.000 personas tendrán la posibilidad de aproximarse al extenso trabajo de este británico que lleva un cuarto de siglo dedicado en cuerpo y alma a la música. Mike Oldfield compuso sus primeras melodías con tan sólo siete años, cuandos sus manos aún eran torpes, pero vocacionales. A partir de los once se estrenó ante el público en pequeños clubes de música folk. Su primera grabación The Children of the Sun -editada al amparo familiar de su hermana, en 1968- rezumaba este estilo. Pero Oldfield, inquieto por naturaleza, buscaba tendencias más innovadoras. Trabajó de bajista con Kevin Ayers en The Whole World y en sus ratos libres se dedicó a investigar sus propias ideas musicales, que recibieron un portazo sistemático en las casas discográficas. La casualidad quiso que conociera a Richard Branson. Y éste, entusiasmado tras escuchar la maqueta del joven músico, fundó su propia compañía y grabó el mítico Tubular Bells, que encaramó a Oldfield al primer puesto en las listas de ventas. Después, en 1995, llegó la versión orquestal con la Royal Philarmonic Orchestra y más tarde Ommadawn. A partir de entonces Oldfield, con las tablas que otorgan los años de experiencia, se embarcó en una nueva etapa marcada por las giras internacionales. Pero no se olvidó de componer. De esa época son Platinium y QE-2, donde se advierte un giro de inflexión en su estilo hacia el pop. Por primera vez incluye trabajos cortos e introduce los temas cantados con la participación de vocalistas como Wendy Roberts y Maggie Reilly. En 1984 grabó una de sus joyas; Discovery, a la que siguieron varios singles y álbumes como Heaven & Acute"s Open o Islands. En los noventa el músico británico ha regalado a sus incondicionales Tubular Bells II y III y brindará Guitars este año. La presentación oficial será en Alemania el próximo 18 de junio, pero el público tendrá que esperar al 1 de julio para verlo en suelo español. El cantante se meterá en el ruedo y lidiará a la audiencia de Illumbe.