Osakidetza aconseja hacerse citologías a las mujeres de entre 25 y 59 años

Se acabo el "desbarajuste" actual en que un ginecólogo le recomendaba a una paciente hacerse una citología para prevenir el cáncer de cérvix cada año, mientras a su prima, por ejemplo, un doctor de otro centro le decía que cada dos años. Los ginecólogos de Osakidetza han unificado -"por consenso", insistía ayer el consejero Iñaki Azkuna- los criterios en cuanto a cuándo y cómo hacer estas pruebas. La citología es la manera más eficaz de prevenir el cáncer de cérvix. De todos modos, la incidencia en Euskadi de esta patología "es una de las más bajas del mundo", subrayó Azkuna. A partir de ahora, cuando cualquier mujer de entre 25 años y 59 que mantenga, o haya mantenido, relaciones sexuales acuda al médico éste le recomendará que se someta a una citología. El nuevo protocolo señala que se le harán dos en otros tantos años y que si ambas son negativas (es decir, no muestran indicios de infección), las posteriores serán cada tres o cinco años. Dependerá de si tienen factores de riesgo: haber tenido una enfermedad de trasmisión sexual o tener múltiples relaciones, ella o su pareja, desprotegidas. Se recomienda hacer el también llamado test de papanicolau incluso a las mayores de 60 años que jamás se lo hayan realizado.