Condena al Ayuntamiento de Alicante por el deterioro de calles

El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) considera que hay una relación causa-efecto entre el mal funcionamiento del servicio de conservación y mantenimiento de las aceras de Alicante y los daños sufridos por Waltraud Willuhn, una ciudadana alemana que se cayó en la vía pública a consecuencia del mal estado del pavimento en la confluencia de las calles de Arquitecto Morell y Pintor Aparicio. El Ayuntamiento ha sido condenado a pagar tres millones de pesetas a Willuhn, que estuvo de baja 511 días. El Consistorio atribuyó los daños que sufrió la mujer "a su conducta negligente". Sin embargo, el tribunal considera que la diferencia de altura existente en la confluencia de las dos calles es, de forma exclusiva, la causa de la lesión. Según el TSJ, la deficiencia es imputable, "en exclusividad", a la entidad pública, a la que el ordenamiento jurídico atribuye la competencia objetiva sobre vías locales. Es decir, que el Ayuntamiento es responsable y debe pagar. Además, la sentencia destaca la "reiteración y mantenimiento prolongado en el tiempo" del desnivel en la calle, lo que dio lugar a otras caídas en ese mismo lugar.El Ayuntamiento desestimó tácitamente (acto presunto) la petición de daños de la mujer, que se elevaba a 13,5 millones de pesetas. Willuhn recurrió el silencio municipal ante el TSJ. A pesar de la condena, el Ayuntamiento considera "un éxito" la rebaja en la cuantía de la indemnización solicitada por la demandante.