La Plataforma del Río Júcar dice que el vertedero de Dos Aguas no resistirá las lluvias

Los miembros de la Plataforma Cívica del Río Júcar, que reúne a colectivos ecologistas, políticos y ciudadanos que están en contra del macrovertedero en construcción de Dos Aguas, están alarmados porque, dicen, las basuras en él acumuladas acabarán en el río, a apenas 400 metros de la base del vertedero, en cuanto haya una tromba de agua de las que periódicamente azotan la zona. Así, en una reciente excursión a lo largo del barranco de Los Charcos, arroyo de aluvión que muere en el Júcar y que a su vez recoge la lluvia del barranco de La Matrona (el del vertedero), la Plataforma constató que no se ha construido ninguna presa capaz de retener una avalancha de basuras. "No hay muro de contención tal y como estaba previsto en el proyecto", explica José Cervera, portavoz del colectivo. Según explica (también aporta diapositivas), el vertedero, previsto para acoger 500 toneladas diarias de basura durante 14 años e instalado en un barranco con una pendiente del 27%, termina en una balsa de lixiviados (líquidos producidos por la fermentación de los residuos) del tamaño de una piscina olímpica. El día de la visita sorpresa, los críticos vieron que varios operarios plastificaban varios desperfectos en la balsa, que además estaba ubierta de arrastres de las lluvias de hace meses. "Si una lluvia insignificante arrastra tanta tierra de los alrededores, que llega hasta el mismo barranco, ¿qué puede suceder dentro de unos años con lluvias torrenciales", alerta Cervera. La Plataforma también asegura que parte de la basura vertida es fresca y no rechazo compactado. Para que la basura no llegara al Júcar, un informe de la Universidad de Valencia aconsejaba hacer una presa de 50 metros de altura, pero la empresa adjudicataria de la obra informó que construiría un muro de 10 metros de alto y cinco de coronación. Ayer, fuentes de la empresa aseguraron que sí se ha construido un dique de cierre, de arcilla compactada ("como la presa de Tous"), que cumple "excrupulosamente con el proyecto". La Plataforma echa de menos un auténtico dique de hormigón.