Detenidos dos hermanos por intentar matar a la ex esposa de uno de ellos

La policía ha detenido a dos hermanos de 27 y 29 años bajo la acusación de querer matar a la ex mujer de uno de ellos. La víctima, de 25 años, recibió una paliza en el portal de su casa, en la calle de Hermanos García Noblejas (San Blas). Ocurrió el lunes a las dos de la tarde. Los agresores se marcharon tras dejar a su víctima con la cara ensangrentada. Ambos fueron arrestados cuando regresaban, armados con cuchillos, a la casa de la mujer para llevarse a los dos hijos de uno de ellos.

Los detenidos son Enrique y Alejandro Miguel A.V., de 27 y 29 años, respectivamente. Están acusados de un supuesto homicidio en grado de tentativa por, supuestamente, querer matar a la ex mujer de Alejandro Miguel, según la Jefatura Superior de Policía. La agresión tuvo lugar en el portal del número 145 de la calle de Hermanos García Noblejas. Allí se escondieron los dos hermanos para esperar a la mujer, A. B. B., y encararse con ella. Cuando llegó, le propinaron una lluvia de golpes, patadas y puñetazos en la cara, los brazos y el estómago. Después, Alejandro Miguel le espetó: "Te voy a matar, y hasta que no lo consiga, no paro". A continuación, los hermanos dejaron a la mujer tendida en el suelo y subieron a la vivienda de la agredida para llevarse a los dos hijos, fruto de los cinco años que duró el matrimonio.

Al subir a la casa abrieron la puerta con la llave y se encontraron con que la madre de la mujer estaba en la vivienda. La abuela se encaró con los dos e impidió que su antiguo yerno se llevará a sus nietos. Es más, sus gritos ahuyentaron a los supuestos agresores. Pero antes de salir prometieron que volverían.

Patrulla de vigilancia

Los dos hermanos se marcharon a su casa. Mientras tanto, la mujer subió maltrecha a su domicilio y otro vecino del bloque, que no se identificó, avisó al 091. Una patrulla de agentes del Cuerpo Nacional de Policía se quedó en el portal para custodiar la vivienda. Tres horas después regresaron los dos hermanos. Blandían en sus manos dos armas blancas. Al llegar al portal se toparon de frente con los agentes. Ambos arrojaron al suelo sendos machetes, de 17 y 19 centímetros de hoja.

La policía detuvo a los dos hermanos sin resistencia. Al ser trasladados a la comisaría, uno de ellos dijo: "Me da igual que me hayáis detenido; en cuanto esté en la calle vuelvo y la mato".

Alejandro Miguel declaró ante el juez que llevaba los machetes sólo para asustar a su ex mujer. Pretendía separar a los hijos de su madre y del hombre con el que actualmente vive "para que no reciban malas influencias". Los hermanos pasaron ayer a disposición judicial. Alejandro Miguel cuenta con antecedentes policiales por amenazas.