La Policía detiene al "Mochaorejas", el secuestrador más peligroso de México

Las andanzas de Daniel Arizmendi, el secuestrador más sanguinario del que se tenga memoria en México, terminaron ayer. A las dos de la madrugada, la policía federal lo capturó junto a varios cómplices al norte de la capital. A la banda de Arizmendi, que acostumbraba a vejar y a desorejar con tijeras a sus víctimas, se le adjudican unos 200 secuestros (entre ellos, los de siete empresarios españoles) en los últimos tres años. La protección brindada por altos mandos de la seguridad pública permitieron a Daniel el Mochaorejas extender su radio de acción a siete Estados del centro y del sur de la República mexicana.

Arizmendi se encontraba en fuga desde el pasado mes de mayo, después de escapar -previo chivatazo- de un operativo policial en el que cayeron su mujer, su hijo y una veintena de cómplices. En tan solo dos meses la policía le confiscó 26 propiedades y casi seis millones de dólares -unos 900 millones de pesetas- que guardaba en cajas de cartón.

Ahora se espera que su testimonio arroje más luz sobre las complicidades que le permirtieron actuar durante tanto tiempo con total impunidad.