Los vigilantes de Punta Umbría no irán armados con porras

Los cuarenta vigilantes de la playa y la localidad de Punta Umbría (Huelva) dejarán de llevar porras de goma a la espera de sendos informes del Ministerio de Interior y de la Consejería de Gobernación de la Junta sobre la legalidad del uso de este tipo de defensas. Este es el fruto de un acuerdo al que llegaron ayer los representantes del Ayuntamiento de la localidad costera y de la Subdelegación del Gobierno en Huelva durante la reunión de la Junta Local de Seguridad de Punta Umbría y que paraliza el enfrentamiento entre las dos administraciones. La polémica surgió cuando la Guardia Civil pidió a dos vigilantes de la playa que se identificasen cuando "se les estaba abriendo un expediente por llevar porras de goma, sin informar primero al Ayuntamiento", una actitud que según explicó el concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Albarracín fue considerada como un "chantaje" por la corporación local. El Ayuntamiento defiende la legalidad de las porras amparándose en que "en situaciones especiales" el alcalde puede determinar los permisos para portar armas y argumenta que la escasez de guardias civiles y policías locales para atender a la población, que pasa de 11.000 a 150.000 personas en verano, es una situación más que especial.