Hospital de los follones

La semana pasada vi en el periódico la convocatoria para un nuevo examen de acceso al Hospital de Alcorcón. La noticia me sorprendió por lo fuera de lugar que está hacer un macroexamen como el que se celebró hace apenas un año. ¿Qué pasa con las personas que, como yo, aprobaron el examen, hicieron la entrevista y quedaron en una supuesta bolsa de trabajo? La respuesta, por muy triste que parezca, está clara: por pocas personas que caigan de nuevo en la tentación de presentarse al examen, a 2.200 pesetas por cada uno, la cantidad debe ser suculenta. Hasta aquí la sensación de malestar, pero aún estaba pensando presentarme a la prueba cuando llegó a mis manos el impreso de la solicitud. Aquí el malestar se convirtió en rabia: soy enfermera, y, que yo sepa, la única especialidad que existe para los diplomados en enfermería es matrona, ¿por qué entonces se accede sólo a servicios especializados concretos? Para poder concursar a cada rama profesional tendría que pagar los derechos de examen multiplicado por cada especialidad. Me parece una pena que, hoy por hoy, se abuse de esta forma de profesionales que quieren sin más desempeñar su función y encuentran tantas trabas digamos de tipo burocrático.Sólo espero que el Hospital de Alcorcón funcione mejor a nivel asistencial que organizativo, porque a fin de cuentas la calidad asistencial debiera ser lo más importante de un centro sanitario, y que éste sea conocido por su buen hacer, no por los follones.- .