El puerto de Valencia se convierte en una piscina

La Travesía a Nado del Puerto de Valencia gana adeptos. La séptima edición, celebrada ayer, congregó a 490 intrépidos, 100 más que el año pasado. El carácter desenfadado y festivo de la prueba no le exime de dureza. "He acabado destrozado. Esto es durísimo, pero vale la pena", afirmó Jorge, un anónimo nadador tras cubrir los 2.320 metros de que consta la travesía. No fue el único que acusó el desgaste. "Si no vienes preparado acabas sucumbiendo", abundó otra participante. En unas aguas no precisamente cristalinas se volvió a imponer Julián Varela, que firmó su tercer triunfo consecutivo. Además de repetir, Varela invirtió dos minutos menos que el año pasado (30 minutos y 35 segundos). Varela no tuvo rival. Alejandro Medín repitió también segundo puesto bajando su mejor registro, aunque lejos del vencedor (31:04). En categoría femenina tampoco hubo sorpresas. Eva Calvo se impuso con un tiempo de 33:09. La Travesía a Nado rindió homenaje a los nadadores adaptados que brillaron en los recientes campeonatos de España disputados en Mislata. Enrique Tornero, que quedó tercero en categoría absoluta, se adjudicó la III edición adaptada, que reunió a 30 nadadores.