Un juez polémico

Enemigos no le faltan. El juez jubilado Luis Figueiras, propuesto por el PP para ocupar el cargo de Síndic de Greuges, despierta recelos en un amplio sector del mundo judicial de Alicante, a pesar de que la primera impresión que causa al conocerlo es la de una persona amable y vivaracha. La mayoría de sus ex compañeros de profesión prefiere no hacer comentarios sobre su trayectoria en la judicatura, y los partidos de la oposición, en especial Esquerra Unida, rechazan su candidatura porque consideran que su actuación al frente de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Alicante "no fue transparente". Recuerdan que el magistrado fue investigado por un presunto delito de cohecho, aunque el caso finalmente se archivó. Unos y otros se prodigan en relatar oscuros episodios y sembrar un mar de dudas y sospechas a micrófono cerrado y bajo promesa solemne de que sus confidencias no serán publicadas. "Es un compañero, ya sabes", afirman. Precisamente por aquel episodio, su relación con la Fiscalía de Alicante, que inició el proceso de investigación, es fría y distante. Estos son algunos de los motivos por los que la oposición considera que Figueiras no es la persona idónea para ocupar el cargo de Síndic de Greuges. Luis Figueiras nació hace 70 años en Valoria de Buena (Valladolid), aunque pasó su juventud en Galicia. Vive en Alicante desde hace 26 años y cuando se jubiló era el presidente de la sección Segunda de la Audiencia Provincial. Estaba dispuesto a ocupar la Sindicatura de Greugres, y consideró "un honor" que el PP lo propusiera. El magistrado dijo que su familiaridad con las leyes le capacitaba para ocupar el cargo. No obstante, precisó que si no resultaba elegido "pues no pasa nada", aunque matizó: "Evidentemente me hace ilusión, porque creo que por mi preparación podría desempeñar el cargo".