Las Abuelas de Mayo denuncian ante Garzón el robo de 500 bebés

Al menos 500 bebés desaparecieron durante la dictadura militar en Argentina (1976-1982). Se esfumaron junto a sus madres. Sólo 59 de esos niños han sido recuperados por sus familias naturales, según denunciaron ayer en Madrid Elsa Pavón y María Issabel Cherobik, del movimiento Abuelas de la plaza de Mayo. Su testimonio se desarrolló ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que instruye en España un sumario por terrorismo y genocidio contra altos cargos de la dictadura argentina.

Elsa Pavón es, además, la primera que ha logrado la custodia de su nieta, después de que ésta permaneciera seis años con la familia a la que fue entregada tras la separación de la madre cuando la niña contaba 20 meses de edad. "Fue una narración tremenda", explicó a la salida el abogado de la acusación particular, Carlos Slepoy, quien aseguró que este testimonio logró emocionar a todos los presentes, incluido al juez Garzón.

Durante la dictadura era una práctica habitual que los militares se quedaran en adopción o traficaran con los hijos de los desaparecidos. Muchos de esos niños apenas tenían unos meses y, en algún caso eran recién nacidos, o que nacieron durante el cautiverio de sus padres. Ahora se encuentran viviendo, ignorantes de su propia historia, con familias que no son las suyas. En ciertos casos puede tratarse de los verdugos de sus padres naturales.