Tchmil ratifica su clase

Nada evitó que la carrera se resolviera al sprint. De bolsillo, pero sprint. Ni la prolongada escapada de Verziagi, que llegó a disfrutar de 20 minutos de ventaja sobre el pelotón; ni los continuos demarrajes que se produjeron en Finestrat, último puerto de la prueba. El Trofeo Luis Puig (Valencia-Finestrat) se decidió en un diminuto sprint tras una carrera muy abierta, marcada por una caída a falta de tres kilómetros. El belga Andrei Tchmil (Lotto), de 35 años, se adjudicó la prueba imponiéndose en los últimos metros a Ekimov (US Postal) y Van Heeswijk (Rabobank).

Estos tres corredores se disputaron la prueba tras evitar una caída a falta de tres kilómetros en la que se vio implicado el grupo principal, de unos 40 corredores. El grupo quedó cortado tras caerse Lombardi, pero Tchmil, Ekimov y Van Heeswijk salieron airosos.

La incertidumbre se mantuvo hasta el final. Los cuatro puertos de que constaba la carrera (186 kilómetros) habían ahuyentado a los velocistas y dificultado los pronósticos, que a estas alturas de la temporada, recién comenzada, son imprevisibles. Tchmil, eso sí, entraba en el grupo de los favoritos. El belga ratificó ayer sus características: es un especialista en carreras de un día. Su palmarés incluye varias grandes clásicas, entre ellas, la París-Roubaix y la París-Tours.

Tchmil, esta vez, no cometió el error que le impidió ganar una etapa en la reciente Ruta del Sol, cuando Van Heeswijk le sorprendió mientras levantaba los brazos celebrando una victoria que finalmente no le correspondió. El belga, nacido en Moldavia, se desquitó ayer.

Hubo otros grandes que corrieron más que nada para acumular kilómetros. Fueron Abraham Olano, Alex Zülle y Marco Pantani, que corría su primera carrera del año. Sus metas están en los meses de calor. Llegaron juntos a más de cuatro minutos.