Un Tour con pocas novedades

Riis, de 33 años, hundido, ha bajado del primero al séptimo puesto con relación al 96. El corrimiento de tierras detrás de él ha sido limpio. El segundo, Ullrich, ha pasado a ser primero, y el tercero, Virenque, a ser segundo. Entre los 10 primeros, sólo cuatro caras nuevas con relación al 96: Pantani, Casagrande, Jiménez y Conti. Desaparecen dos viejos que nunca más volverán -Ugrumov y Rominger-, un ciclista guadiana -Luc Leblanc, año sí, año no- y uno que no estuvo a la altura de las expectativas, el austríaco Luttenberger (5º en el 96, l2º en el 97). Pantani, sin embargo, no es nuevo en el podio, ya lo visitó en 1994. Conti, el décimo, es un veterano (32 años). Los dos han mostrado sus límites. Francesco Casagrande y José María Jiménez, también, aunque con diferencias. El italiano, gran esperanza desde hace años vivió un Tour sin presión hasta que se enfrentó a la prueba de fuego: una última contrarreloj en la que sería examinado con lupa. La presión le hundió. Jiménez, espectacular en la montaña, habría acabado también octavo, o quizás séptimo, si hubiera sido el jefe de filas del Banesto. Siendo generosos, se podría cifrar en 5 minutos el tiempo que perdió ayudando a Olano; sólo en la contrarreloj última perdió ocho con relación a su jefe. Su límite está ahí mientras no mejore en las contrarreloj.Si se baja hasta los 20 primeros, los nombres que aparecen tampoco dicen mucho. Camenzind, Nardello, Boogerd, Luttenberger... Hombres cuyas aspiraciones eran quedar entre los 20 primeros. Hombres medianos que poco han enseñado. Sin osadía para ir más adelante.

Pocas expectativas, así, despiertan las caras nuevas de este Tour.