CiU no se sentirá "corresponsable" de los éxitos o fracasos del nuevo fiscal jefe

Los nacionalistas catalanes se desmarcaron ayer nuevamente del Gobierno al sentirse ajenos al nombramiento de Eduardo Fungairiño como fiscal jefe de la Audiencia Nacional, pese a admitir que la designación es "jurídicamente impecable". El otro socio del Gobierno, el PNV, se mostró menos tibio y, por boca de su portavoz, Iñaki Anasagasti, achacó a una "campaña personal" la indignación que ha provocado entre los fiscales el nombramiento.El Grupo Popular, por su parte, halló "ajustada a derecho" la designación de Fungairiño y apreció "un pequeño tufillo corporativista" en las reacciones en contra de las asociaciones de fiscales.

El diputado de CiU Josep López de Lerma, vicepresidente del Congreso, compareció ayer ante los medios de comunicación mostrando su satisfacción por volver a ejercer como portavoz de la Mesa del Congreso después de que el resto de sus compañeros de ese órgano de dirección, encabezados por el presidente, Federico Trillo, le pidieran que retirara su dimisión. López de Lerma anunció la pasada semana que estaba dispuesto a abandonar su puesto tras recibir las críticas de la diputada y miembro de la Mesa María Bernarda Barrios, del PP, que acusó a López de Lerma de aprovechar su cargo institucional para hacer declaraciones de partido críticas con el Gobierno.

Doble papel

Después de que todos los miembros de la Mesa, incluida Barrios, le prestaran su apoyo, López de Lerma ejerció como hasta ahora los dos papeles: primero habla en nombre de la Mesa y, cuando se le hace una pregunta partidista precisa que se quita el sombrero institucional y se coloca el de nacionalista catalán.Eso hizo ayer para afirmar lo siguiente: "CiU no es responsable del nombramiento del señor Fungairiño, por lo que no vamos a ser corresponsables de sus éxitos o de sus fracasos". Ahora bien, señaló que desde el punto de vista jurídico el nombramiento "es impecable" al no ser vinculante el informe que emitió el consejo fiscal. "Es un acto de gobierno y no está de más recordar que, según la Constitución, hay una dependencia jerárquica del fiscal hacia el Gobierno".

El portavoz peneuvista, Iñaki Anasagasti, defendió la decisión del Gobierno de nombrar a Fungairiño aunque admitió que el Ejecutivo "no ha medido" que la designación "iba a suscitar una reacción tan virulenta por parte de los fiscales", una situación que achacó a una campaña personal contra el nuevo fiscal jefe "porque ha habido casos de irregularidades en el pasado que no han merecido una reacción tan fulgurante".

Luis de Grandes, del Grupo Popular, animó a las asociaciones de fiscales o a quien lo crea conveniente a que presenten un recurso si creen que el nombramiento del fiscal jefe de la Audiencia Nacional no es legal.