Rajoy admite que la financiación costará 250.000 millones

El ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, admitió ayer que el Gobierno prevé un costo adicional del nuevo sistema de financiación autonómica entre 200.000 y 250.000 millones de pesetas. Mariano Rajoy, siempre reacio a dar cifras sobre el coste del nuevo sistema, lo hizo ayer en el Senado ante la interpelación presentada por el senador socialista Octavio Granados. Los socialistas estiman, por el contrario, el costo adicional en un billón de pesetas y aseguran que estas cifras "ponen en solfa el plan de estabilidad presentado por el ministro de Economía, Rodrigo Rato". Granados aclaró que el plan de estabilidad no tenía en cuenta el costo de la financiación autonómica. "El Gobierno partía de un coste cero".Granados añadió que la cifra de 250.000 millones sólo abarcaba el importe de los fondos de garantía para las comunidades autónomas como consecuencia de la previsible caída de la recaudación del IRPF por debajo de la media de los impuestos. Explicó también que el Gobierno tendrá que afrontar otros gastos por las compensaciones a las comunidades autónomas, de forma bilateral, como consecuencia de las pérdidas que éstas sufren por las deficiencias del sistema.

Granados adelantó que el Gobierno ya había entregado a Cataluña 32.105 millones en una valoración añadida de transferencias; a la comunidad valenciana 11.250 millones y a Canarias más de 8.000 millones. Añadió que otras comunidades autónomas también recibirán compensaciones bilaterales y puso como ejemplo el régimen fiscal de las Islas Baleares.

El senador socialista denunció asimismo los "efectos perversos" del nuevo sistema como consecuencia de la previsible caída en la recaudación del IRPF, y señaló que al ser algunas de las comunidades más ricas -como Cataluña y Madrid- de las más perjudicadas por esta caída de la recaudación serían precisamente las que se beneficiarían de los fondos de compensación.